Higiene durante el embarazo
Durante el embarazo la higiene es fundamental para evitar la aparición de enfermedades y para conservar la salud y el bienestar tanto de la madre como de su futuro hijo.
Pero la higiene no solo abarca el aseo y el cuidado escrupuloso del cuerpo; también debe incluir la adopción de buenos hábitos y de ciertas precauciones básicas en la manipulación de los alimentos.
– Durante la gestación aumenta la sudoración y el flujo vaginal, por lo tanto, es conveniente ducharse a diario, utilizando un jabón de pH neutro.
– Aplicarse una crema o aceite corporal para mantener la piel bien hidratada.
– Se pueden utilizar desodorantes sin problema.
– La ropa interior debe ser holgada y confeccionada en algodón u otros tejidos transpirables. La ropa ceñida está desaconsejada.
– Es muy importante lavarse los dientes después de cada comida y realizar una revisión odontológica antes del embarazo o durante los primeros meses.
– El rostro merece los mismos cuidados que antes: limpieza diaria con productos específicos, aplicación de tónicos y cremas hidratantes, etc.
– Masajear la zona del pecho que rodea el pezón colocando el dedo pulgar en la parte superior y el índice por debajo. Este ejercicio refuerza los senos.
– Hacer ejercicio físico moderado para estar en forma, además de la Yoga prenatal. Pasear todos los días ayudará a relajarse y a conciliar mejor el sueño.
– No realizar esfuerzos físicos exagerados, no fatigarse ni cargar grandes pesos.
– Adoptar una posición correcta, con la espalda recta, tanto mientras se está sentada como de pie.
– Evitar el calzado de tacón alto así como el que sea completamente plano.
– Utilizar prendas cómodas y adaptadas en cada momento a la nueva talla.
– Salvo que su Ginecóloga(o) lo aconseje, no es necesario usar faja.
– No descuidar el control de embarazo.
– La automedicación está prohibida durante la gestación, pero, en caso de enfermedad, la futura mamá debe tomar el tratamiento que el médico le indique.
Manipulación de los alimentos:
– Comer la carne y el pescado cocinados, preferiblemente a la plancha o hervidos.
– Evitar que se produzca un aumento excesivo de peso.
– Consumir abundantes frutas y verduras, perfectamente lavadas.
– Eliminar de la dieta alimentos elaborados con grasas de origen animal y productos prefabricados.
– Disminuir el consumo de café, té y bebidas con cafeína. Los Ginecólogos en Guadalajara no recomiendan este tipo de bebidas, ya que esta sustancia puede atravesar la placenta y alterar la frecuencia cardíaca y respiratoria del futuro bebé. Evitar el alcohol y el tabaco.